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martes, 2 de diciembre de 2008

Dando GRACIAS a DIOS

Este pasado jueves, como parte de la tradición celebramos el día de Acción de Gracias, con pavito y todo. La verdad que es un día que disfrutamos muchisímo pues la pasamos en familia. Nos reunimos en casa de doña Ada, mi querida suegra, se prepara la mesa, nos tomamos la foto tradicional y luego nos agarramos de la mano y damos gracias por nuestras bendiciones que son muuuchas.
Aunque a veces pasamos por pruebas difíciles, la esperanza, la fe en Dios y el amor por esos seres tan maravillosos que nos aman y amamos, nos da la fortaleza para seguir adelante y darnos cuenta que realmente estamos más que bendecidos. Así que ahora que tengo la oportunidad de volver a estar por aquí, tengo laptop nueva (wiiiipiiii), quiero compartir con ustedes unas cuantas, de mis tantas bendiciones por las que doy gracias a Dios todos los días.

Así que doy GRACIAS a DIOS por:

  • Mi hermoso núcleo familiar, por el apoyo y el amor que nos brindamos siempre. Porque ellos son la razón de mi vida.

  • Por Iván, ese hombre tan maravilloso que puso Dios en mi camino. Por cuanto lo amo y él me ama a mí. Por la vida que hemos compartido juntos.

  • Por mis hijas, Estéfani y Zaide. Por lo hermosas que son por dentro y por fuera. Porque se aman una a la otra, porque brindan mucho amor. Por haber tenido la oportunidad de verlas crecer y convertirse en tan espectaculares mujeres.
  • Mis ahijados, Adrián, Coralys y Karina, los cuales amo como si los hubiera parido, porque Iván y yo lo aceptamos como nuestros hijos ante Dios en la iglesia, por confianza que nos dieron sus padres, mis queridos compadres.
  • Por mami, Aida y mi hermano, Benjamín, por ese gran amor que siento por ellos y me consta ellos sienten por mi. Por estar siempre junto a mi cuando más los necesito.
  • Por Alejandro Omar, mi hermoso sobrino, ese niño tan especial que mi hermano me brindó, al que amo con todo mi corazón.
  • Por mis queridas sobrinas, Adariana, Dianelys y Karina, que aunque no llevan mi sangre, comparten la de mis hijas y eso es más que suficiente para amarlas con todo mi corazón y sentir que son parte de mí.
  • Por un hombre maravilloso, Angel que Dios puso en el camino de Estéfani. Por este chico que quiere, respeta y protege a mi hija.
Doy y seguiré dando GRACIAS a DIOS todos los días, por tantas y tantas bendiciones, por las que he compartido hoy con ustedes y por todas las otras que no he compartido aquí, pues sino no terminaría jamás. Por mi familia, por mis amigos, pero sobretodo por mi vida llena de bendiciones.

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